Hasta ahora, estudiar Formación Profesional era una garantía de empleo. Sin embargo, la crisis también está pasando factura a quienes se decantan por este tipo de estudios. La tasa de ocupación ha descendido un 25% en sólo tres años e incluso en las titulaciones de la rama industrial, en las que el trabajo estaba prácticamente asegurado, cada vez cuesta más encontrar un hueco.

El 61% de los estudiantes que acabaron un ciclo formativo en 2009 tardó menos de nueve meses en encontrar un empleo. La cifra no es mala, pero es la peor de la última década. De hecho, en 2007, el 87% daba con un trabajo en este mismo periodo de tiempo. Ni siquiera las familias profesionales que tradicionalmente han tenido mejores tasas de inserción se libran de los efectos de esta crisis. Fabricación Mecánica, Edificación y Mantenimiento, y Servicios a la Producción son un buen ejemplo de ello. La tasa de ocupación rozaba prácticamente el 100%, sin embargo, ahora sólo la mitad de los titulados encuentran trabajo a corto plazo.

Así lo constatan las encuestas realizadas por el Observatorio del Sistema Vasco de Formación Profesional, a través de Lanbide, que aprecian bajadas importantes en los niveles de inserción de aquellos que estudian informática, química, hostelería, turismo o ciclos relacionados con la Sanidad, mientras que se mantienen con menos alteraciones las titulaciones relacionadas con Servicios a la Comunidad.

Pese a todo, un año más el número de matriculaciones en FP ha vuelto a experimentar un importante repunte. En concreto, 40.576 personas se han inscrito en alguno de los ciclos formativos ofertados, lo que supone un 10% más respecto al curso pasado. No todos ellos cursarán los estudios de forma presencial. Euskadi estrenará este mes de septiembre la modalidad a distancia, que llega con una oferta de seis titulaciones: Educación Infantil, Administración de Sistemas Informáticos en Red, Programación de la Producción en Fabricación Mecánica, Instalaciones Eléctricas y Automáticas, Cocina y Gastronomía y Emergencias Sanitarias.

Se trata de una de las principales novedades del III Plan Vasco de Formación Profesional, que ayer volvió a presentar el Departamento de Educación del Gobierno Vasco. Tampoco en esta ocasión la consejera, Isabel Celaá, desgranó nuevos detalles del documento, que incluye, según explicó, 19 medidas para mejorar la FP vasca. Entre ellas, un programa de refuerzo de inglés que pondrán en marcha el próximo curso todos los centros públicos y privados de la CAV para los alumnos de segundo curso, y que tendrá carácter voluntario.

Además, el plan busca "facilitar la empleabilidad de las personas", especialmente la de aquellos colectivos que carezcan de una cualificación reconocida, según explicó Celaá. De esta forma, un dispositivo de reconocimiento de la competencia permitirá que las personas que posean cualificaciones profesionales adquiridas a través de la experiencia las puedan acreditar para obtener una titulación laboral. Para este colectivo, se habilitarán un total de 2.920 plazas.

Fuente: noticiasdegipuzkoa.com